El régimen político colombiano ha venido adquiriendo progresivamente rasgos de lo que O’Donnell caracteriza como democracia delegativa. Los procesos de autonomización de la política monetaria y la política fiscal, desde el punto de vista de la autonomía del banco central y la tesis de fiscalizadores independientes, son representativos de esta tendencia. La clausura de los escenarios de decisión en materia de política económica y el fortalecimiento de democracias tecnocráticas en su pretensión de recuperar niveles de gobernabilidad aceptables, terminaron aislando los procesos de decisión sin responder a presiones populares ni debate público, frustrando, de esta manera, la aspiración de construir sociedades más igualitarias y menos excluyentes. Contrario a lo que pueda pensarse, la innegable crisis del discurso imperante no ha sido suficiente para revertir sus presupuestos ni sus realidades. Más aún, en contra de las reiteradas resistencias y los descontentos sociales su pretensión de permanencia se revalida constantemente al insistir en la consolidación del proyecto socio-político y económico que, en nuestro país, ha sido abanderado por diferentes bloques de poder. Particularmente, se han desplegado toda clase de estratagemas (verbi gratia, las promesas que inevitablemente se van a cumplir después de todos estos sacrificios; la acentuación del componente carismático en las opciones políticas, el TLC para “someter” las reformas introducidas y garantizar así su irreversibilidad hacia el futuro, entre otros.) para buscar, por todos los medios, asegurar su prolongación. Todas estas técnicas políticas del discurso hegemónico hacen parte del modo con el que tradicionalmente operan las reformas y transformaciones económicas en la región. La complejidad de los vínculos existentes entre los cambios políticos, económicos y sociales enunciados subraya la necesidad de una aproximación analítica balanceada desde la historia reciente de Colombia y la realidad de las transformaciones actuales, que haga inteligible y pueda estimar las influencias presentes y las posibilidades futuras de construcción y consolidación de una democracia participativa, equitativa y más justa en Colombia. Se trata de manera más precisa de la pregunta por las tendencias, los momentos, los sujetos y las claves de las reformas estructurales frente a la democracia y la política económica y social, durante el período comprendido entre 1991 y 2008. El objetivo general del proyecto consiste en determinar cuáles son las consecuencias que en materia de política social genera el proceso político de consolidación de la democracia delegativa en la conducción de la política fiscal y monetaria en Colombia entre 1991 y 2008. Lo anterior con el propósito de generar un conocimiento innovador desde el punto de vista teórico-documental sobre el problema de la democracia y la política social, a partir de un análisis crítico y propositivo que sirva como punto de referencia para posteriores investigaciones en el marco de las ciencias sociales para centros y grupos de investigación inter y trans disciplinarios vinculados al estudio de la problemática económica, política y social colombiana y actores políticos estatales y no estatales. En suma, un estudio crítico de las tendencias y las interrelaciones que se establecen entre la conducción de una política económica y la configuración de una democracia con rasgos delegativos, permite: (i) establecer las claves analíticas y los instrumentos concretos para comprender de manera amplia la problemática de una democracia clausurada y despolitizada, y una sociedad fragmentada por la exclusión, los bajos niveles de bienestar y una política social residual y asistencialista, (ii) perseguir soluciones puntuales y (iii) formular efectivamente un sentido de construcción de Nación y de país, en el marco de la consolidación de una verdadera eticidad democrática. Para la consecución de los objetivos planteados, se atenderá al criterio de flexibilidad metodológica, pero conservando el de rigurosidad científica. La investigación se ubicará en el paradigma cualitativo, con enfoque histórico-hermenéutico y utilizando herramientas de investigación provistas por diversas disciplinas, en especial la economía, la ciencia política y la sociología.