Colombia es un país con gran potencial arqueológico gracias a su rico pasado prehispánico y colonial, que dejó abundantes vestigios materiales a través de los cuales es posible reconstruir las dinámicas formas de vida de dichas sociedades. No obstante, para que las interpretaciones arqueológicas sean coherentes y útiles es necesario situarlas en un espacio y tiempo determinados que permita vislumbrar los procesos de cambio. En esta medida, la datación absoluta en arqueología es fundamental ya que permite evaluar la antigüedad de objetos o restos arqueológicos en términos independientes de otros objetos de estudio. Asimismo ésta se ha llevado a cabo mediante múltiples técnicas adaptadas a los distintos materiales y rangos de antigüedad. En las investigaciones arqueológicas en Colombia la cronología absoluta se ha basado en dataciones radiocarbónicas. Los encargados de procesar las muestras para hacer la datación respectiva siempre han sido laboratorios ubicados en Estados Unidos y Europa, debido a que los recursos técnicos y científicos están suficientemente desarrollados para datación en estos lugares. Sin embargo el datar una muestra a través de este método implica unos costos de envío y procesamiento de la misma en el laboratorio, además de las limitaciones en la máxima edad medida en las muestras. En Colombia, desafortunadamente, no existe la tecnología necesaria para poder llevar a cabo una datación radiocarbónica, por lo tanto la técnica de datación usando resonancia paramagnética electrónica (EPR) se abre como una nueva posibilidad para emprender estudios de datación absoluta y puede servir de apoyo para futuras investigaciones arqueológicas. Además es una técnica que puede determinar edades en un rango de tiempo superior al cubierto por la datación con C14 (60.000 años BP) llegando a cubrir el total del periodo cuaternario [1-5] En el Departamento de Física de la Universidad Nacional de Colombia existe un equipo de Resonancia Paramagnética Electrónica (EPR), así como personal capacitado para manejar éste y para analizar e interpretar los datos que de él se obtengan. De este modo se pretende, a través de un proyecto interdisciplinario, datar por EPR y en una primera instancia comparar los resultados con los ya obtenidos a partir de la datación radiocarbónica. Esto traería como consecuencia un impulso a la investigación en el campo de la datación arqueológica, y dado que se está utilizando infraestructura propia, se ahorrarían recursos utilizados para el envío y tratamiento de muestras en laboratorios extranjeros. El presente trabajo es uno de los primeros esfuerzos en usar datación EPR en Colombia, y puede representar grandes beneficios en futuras investigaciones arqueológicas en nuestro territorio.