En la mayoría de los estudios de ensayos clínicos que se han publicado en los últimos 4 años para el tratamiento de lesiones cardíacas y vasculares, donde se utilizaron células madre mesenquimales (mesenchymal stem cells, MSCs) extraídas a partir de médula ósea, se observó mejoría de los parámetros de la función cardiovascular y la perfusión distal, posterior a la inducción de isquemia y/o hipoxia (1;2;3). Uno de los posibles mecanismos por el cual las MSCs producen este efecto benéfico es la secreción factores proangiogénicos y proarteriogénicos. Este mecanismo sería semejante al efecto paracrino que ocurre en la médula ósea, donde las MSCs, son fuente de factores reguladores que proporcionan las condiciones para una eficiente hematopoyesis. En diversos estudios, se ha demostrado que las MSCs expresan genes inductores de la angiogénesis, como el factor inducible por hipoxia 1 (HIF-1), el factor de crecimiento vascular endotelial (VEGF), la angiopoyetina 1 (Ang-1), el factor de crecimiento de fibroblastos (FGF), el factor de necrosis tumoral (TNF-), el factor neurotrófico derivado de cerebro (BDNF) y de algunas citoquinas, como la IL-3 y IL-6, que permiten el desarrollo, crecimiento y maduración de vasos sanguíneos (1;2;4). Aunque las MSCs se han obtenido principalmente de la médula ósea (BMMSCs), una fuente alternativa y abundante de estas células es el tejido adiposo subcutáneo. Las MSCs derivadas de tejido adiposo (AdMSC) poseen características similares a las MSCs obtenidas a partir de la médula ósea. Las Ad-MSCs secretan factores de crecimiento capaces de favorecer in vivo la angiogénesis y la arteriogénesis en modelos de isquemia animal. En un trabajo previo de nuestro grupo de investigación, se demostró que las AdMSCs expresan un grupo de factores que favorecen la neovascularización. (5) Se ha reportado además que estos factores son secretados al medio de cultivo, abriendo la posibilidad de emplear, en lugar de las MSCs, los medios de cultivo condicionados por dichas células para el tratamiento de enfermedades cardiovasculares y heridas crónicas. Es por lo tanto prioritario desarrollar modelos para la caracterización de medios de cultivo condicionados de MSCs y cuantificar su potencial angiogénico.