El acceso a la vivienda social, en cualquier país Latinoamericano, se da a partir de diferentes planes, programas y proyectos que se desarrollan con el fin de garantizar un derecho fundamental, el derecho a la vivienda digna y adecuada. Los anteriores, se crean justamente como una respuesta a un problema social, económico y cultural que prevalece en toda la región y es el déficit habitacional. Sin embargo, la magnitud es tal, que ningún gobierno está en la capacidad de tener una cobertura total de vivienda digna y adecuada para cada uno de sus habitantes. Las condiciones precarias en las que habitan millones de personas en la región, se dan en cierta medida, como resultado de la globalización y de un modelo económico pensado en la acumulación de capital y la falta de controles que pone el libre mercado. Dentro de toda la población que se encuentra en estado de vulnerabilidad, se encuentran los recicladores de oficio.
La población recicladora de oficio, en su gran mayoría, no puede acceder a una solución de vivienda dentro de la oferta que tienen las entidades estatales. En Bogotá, sólo el 11,4% de los recicladores de oficio viven en una vivienda propia, que la mayoría de los casos, se encuentra en una condición precaria. El resto tiene mínimas oportunidades de habitar en una vivienda digna y adecuada, tampoco le es posible acceder a créditos o subsidios, entre otras cosas. El presente trabajo de investigación busca entender los modos de habitar de población recicladora de oficio en la ciudad de Bogotá, con el fin de proponer recomendaciones de política pública que le permitan a los miembros de una cooperativa de reciclaje acceder a una vivienda digna y adecuada, teniendo en cuenta las particularidades de su oficio. |