El proyecto busca investigar las transformaciones políticas y culturales de las comunidades de las cuencas de los ríos Jiguamiandó y Curvaradó, en el Bajo Atrato, en el proceso de retorno a sus tierras, que han sido invadidas ilegalmente por palmicultores, y en sus iniciativas de resistencia civil para la reclamación de la propiedad colectiva, a través de expresiones particulares, que articulan en su discurso, la autodefinición étnica, la defensa del medio ambiente y el derecho a la vida y al territorio. Analizará también, las condiciones del desplazamiento forzado, de estas comunidades a partir de 1997 y el repoblamiento actual, con proyectos agroindustriales y participación de desmovilizados de las AUC.