Esta investigación es un intento por reivindicar el habitar mundano, encarnado en el espacio público de Manizales provocado a partir entre otros, de expresiones artísticas como el muralismo, el cual ha sugerido lugares otros, estimulando la ciudad a habitar nuevas y distintas realidades. Para este propósito, entendemos la ciudad NO como un receptáculo vacío o un escenario inerte para ocupar, sino como un cuerpo vivo, dinámico y performativo, es decir, como un lugar, donde a partir de la experiencia física se verifica una experiencia existencial, anteponiendo en tanto vividas y simbólicas, las prácticas y relaciones sociales que allí se suceden. |