Entre los modos de variabilidad climática, el asociado al El Niño Oscilación del Sur (ENOS), es el más importante del sistema climático de la tierra en la escala interanual. Por su ubicación en el borde costero de la Ensenada de Panamá (Pacífico Oriental Tropical), Colombia experimenta grandes impactos socioeconómicos durante el ENOS, y sectores tan variados como transporte, vivienda, agricultura, energía, pesca, biodiversidad, se ven fuertemente afectados. Durante la fase cálida (el Niño), gran parte del territorio nacional, especialmente las regiones Caribe, Andina, Orinoquía y la porción central y norte de la región Pacífica, experimenta una drástica disminución del volumen de las precipitaciones y un aumento de la temperaturaa del aire, lo que trae consigo el incremento en la frecuencia de incendios forestales, problemas de desabastecimiento de agua potable en acueductos rurales y urbanos, reducción de la productividad agrícola y pecuaria, bajos niveles de los ríos, menor disponibilidad de agua para la generación de energía, y aumento de la incidencia de enfermedades tropicales. Durante la fase fría (La Niña), el incremento de las precipitaciones, eleva la probabilidad de ocurrencia de inundaciones en diferentes zonas del territorio nacional, así como de deslizamientos de tierra generados por saturación de agua en los suelos, ocasionando grandes pérdidas económicas. Las alertas tempranas, comunicados y boletines nacionales relacionados con el ENSO son generados por el IDEAM (Instituto de Hidrología y Meteorología y Estudios Ambientales), principalmente con base en los reportes de la NOAA (National Oceanographic and Atmospheric Administration), que a su vez se basan en el Índice Oceánico del Niño (ONI). Este índice es calculado para la región Niño 3.4, la cual está ubicada a más de 7,800 km de las costas de Suramérica, por lo que puede ser apropiada para comprender los efectos remotos, pero no para entender en todas sus dimensiones los efectos locales de la Ensenada de Panamá. Buscando abordar esta problemática, se han formulado algunas alternativas para la región. Por ejemplo, el Comité Multisectorial para el Estudio del Fenómeno El Niño (ENFEN) de Perú, estableció desde 2011 el Índice Costero El Niño (ICEN) para definir la presencia de eventos ENOS en las aguas de Perú. Así mismo, desde 2013 se propuso el índice costero de Tumaco, como una alternativa para hacerle seguimiento a los eventos extremos ENOS. No obstante, dada la ubicación de la localidad, hay una fuerte influencia de procesos costeros, como por ejemplo el aporte del río Mira, y el índice no refleja adecuadamente las condiciones de la zona oceánica de la Ensenada de Panamá. Por lo tanto, esta propuesta tiene como objetivo generar un índice de variabilidad climática para la Ensenada de Panamá, incluyendo la zona oceánica, como referente para identificar y monitorear eventos de variabilidad interanual en la región, usando fuentes de información de datos derivados de sensores remotos y/o interpolados, reconstruidos y de reanálisis. El índice climático de la Ensenada de Panamá podrá ser usado por IDEAM y DIMAR, y contribuirá mejorar la planificación, de la gestión del riesgo climático, y a orientar y priorizar las decisiones e intervenciones a nivel territorial y sectorial, durante eventos de variabilidad climática como los asociados al ENOS