El proyecto aplicará metodologías integradas con base en la estima de la diversidad y del funcionamiento de ecosistemas fluviales. Así, el estudio de organismos indicadores de diversidad (diatomeas) se combinará con medidas funcionales (producción primaria y estructura trófica de la comunidad de macroinvertebrados), geomorfología y química del agua, con el fin de efectuar recomendaciones de conservación de ecosistemas fluviales de cabecera en áreas amenazadas por la intensa actividad humana. Se compararán sistemas prístinos con otros amenazados por impactos humanos (alteración del hábitat fluvial, exceso de nutrientes). De esta manera, se prevé elaborar herramientas de diagnosis funcionales en los sistemas fluviales. Estos objetivos se desarrollarán principalmente en las cabeceras, áreas de elevada diversidad y sensibles a los impactos humanos. El proyecto combinará descriptores estructurales y funcionales, para formular criterios de conservación de áreas potencialmente amenazadas y que precisan protección. Se pretende que los resultados obtenidos a partir del estudio de un cierto número de sistemas fluviales puedan ser de aplicación a la conservación de ríos.