Este proyecto busca restituir la experiencia vivida del ascenso social de seis familias afrodescendientes originarias de las regiones Caribe y Pacífico, a partir de dieciocho historias de vida cruzadas de tres miembros de tres generaciones distintas de una misma familia. Nuestro propósito es establecer los vínculos entre las trayectorias individuales de cada uno de estos miembros y los procesos histórico-sociales ligados a la inserción de estas familias en las clases medias bogotanas.
El proceso de movilidad social ascendente de una pequeña capa de la población afrodescendiente al que haremos referencia se dio desde los años 1930, momento en que el país se vio obligado a buscar nuevas vías de modernización económica e industrial y adoptó un discurso sobre el mestizaje racial como esencia de la colombianidad (Andrews 2007). Nuestro proyecto pretende dar cuenta de este proceso y de los efectos que tuvo la redefinición de la identidad nacional en términos de multiculturalidad y plurietnicidad y la apropiación de un proyecto político y económico que ha mezclado, a partir de los años 1990, políticas multiculturales con reformas neoliberales.
En esta investigación las clases medias serán entendidas como grupos sociales que ocupan una posición intermedia en el espacio social, tanto por su nivel educativo como de ingresos, y que afirman un estilo de vida asociado con los valores modernos (Bourdieu, 1998). El lugar central que le hemos atribuido a las clases medias afrodescendientes obedece a la constatación de su ausencia tanto en el relato de la historia moderna del país como en el de la inserción de la población afrodescendiente en la historia nacional. Es importante mencionar que no tenemos estudios suficientemente específicos que den cuenta del tamaño de esta población, pero según datos de la ENDS 2015 el 17% de la población afrocolombiana estaría en el quintil medio de riqueza y serían el 33% si agrupamos el quintil medio y el alto, aunque están claramente sobrerrepresentada en el quintil bajo y más bajo 55%.
Este proceso social, mediante el cual ciertos cuerpos, grupos sociales, culturas y etnicidades son producidos como si pertenecieran a una categoría fija de sujetos definidos en términos raciales (Banton 1996), es más fácil de discernir en las clases medias que en las clases populares, donde las relaciones de explotación de clase parecen desdibujar las desigualdades raciales y la singularidad de estos efectos. Por otra parte, las diferencias de origen geográfico de las familias nos posibilitan mostrar los contrastes regionales en las articulaciones entre raza y clase social, y las distintas formas de negociar la posición social que adoptaron las mujeres y hombres afrodescendientes en cada uno de los lugares donde han transcurrido sus vidas.
A través de los relatos biográficos, asociados a configuraciones regionales y a formas distintas de relacionarse con la identidad y con la cultura negra, identificaremos los ejes que organizan los recuerdos de los hechos, personajes y personas significativos para cada mujer y hombre entrevistado, en cada una de las tres generaciones, en relación con sus procesos de ascenso social. Las diferencias en los relatos según género y generación nos permitirán distinguir las trayectorias migratorias, laborales, las estrategias conyugales y los hitos sociales, políticos y culturales que se identifican como relevantes en este proceso simultáneo de enclasamiento y racialización. Una orientación teórico-metodológica interseccional apoyará la reconstrucción de estas memorias familiares a partir de las interrelaciones de raza, género y clase que las configuran. Además de estas fuentes orales haremos uso de archivos familiares (como los álbumes de familia u otra clase de documentos privados), archivos institucionales (como la prensa nacional, Anales del Congreso, tesis universitarias) y de conversatorios en las zonas escogidas y en Bogotá. |