El Negro Remazol B es un colorante sintético de origen azoico, ampliamente usado en la industria textil, del plástico, alimentos, farmacéutica entre otras, debido a su alta estabilidad química, poca biodegrabilidad, resistencia al ataque microbiano, agentes oxidantes y fotoquímica (Nabil et al., 2014). Sin embargo, este tinte, al igual que los demás empleados en la tintura de tejidos y papel, no se fija en un 100 %, lo que induce a la contaminación de las aguas empleadas para el lavado de los textiles. Estas aguas residuales de tinturación y lavado ocasionan problemas de coloración de los efluentes, que alteran los procesos fotosintéticos y resultan tóxicos a los organismos propios del ambiente acuático (Efligenir et al., 2014). Las estrategias de remediación de las aguas provenientes de las industrias que emplean los tintes sintéticos incluyen métodos convencionales como: adsorción, electroquímico, oxidación con hipoclorito de sodio, coagulación, biodegradación, entre otros. Sin embargo, ninguno de estos métodos es 100 % efectivo; sus mecanismos (físicos, químicos o biológicos), pueden resultar específicos para algunas estructuras, y/o efectivos solo a bajas concentraciones del contaminante (Cortazar-Martínez et al., 2012; Brillas & Martínez-Huitle, 2014). Como alternativa o complemento a las técnicas convencionales, en las dos últimas décadas han surgido los Procesos de Oxidación Avanzada (AOPs, por su sigla en inglés Advanced Oxidation Processes), (Garzón et al., 2009; Loures, Alcântara, & Filho, 2013), basados en métodos catalíticos químicos, fotoquímicos o electroquímicos. Éstos métodos involucran la generación de especies intermediarias de gran poder oxidante, principalmente radicales hidroxilo (OH•), capaces de reaccionar con contaminantes orgánicos e inorgánicos; por lo que resultan ideales para el tratamiento de aguas contaminadas con compuestos recalcitrantes provenientes de las industrias química, agroquímica, textil, pinturas, etc. (Gómez et al., 2000). Se ha demostrado que la fotocatálisis empleando dióxido de titanio (TiO2) como catalizador bajo la radiación de luz ultravioleta (UV), es efectiva y viable para la destrucción de contaminantes recalcitrantes (Loures, Alcântara, & Filho, 2013). Esta aplicación fotoquímica, ha despertado mucho interés entre la comunidad científica internacional, pues a diferencia de la mayoría de los procesos fotoquímicos, no es selectiva, resultando muy efectiva para tratar mezclas complejas de contaminantes (Nan, Jin, Chow, & Saint, 2010). Por lo anterior, con el presente proyecto el grupo de investigación Producción, Estructura y Aplicación de Biomoléculas (PROBIOM), de la Universidad Nacional de Colombia - Sede Medellín, desea dar continuidad a la investigación orientada al tratamiento de aguas residuales contaminadas con colorantes sintéticos, como el Negro Remazol B, mediante el empleo de la fotocatálisis heterogénea con TiO2/UV.