Colombia ocupa el cuarto lugar en América Latina en número de casos de VIH/SIDA reportados. Según registros del Instituto Nacional de Salud, y el informe de situación del VIH/SIDA en Colombia 2013 Se reportaron un total de 46.348 portadores de VIH, lo que establece una prevalencia en población general para el país de 0,11% y en población de 15 a 49 años de 0,16% (0,20% para el régimen contributivo y 0,12% para el subsidiado), la cual aumentó en relación con los datos del año anterior (en población general 0,09% y de 15 a 49 años 0,13%). Para el 2013 según este informe el incremento en el número de casos diagnosticados y varío según la distribución departamental encontrando que las prevalencias más altas en población de 15 a 49 años por departamento se encontraron en Quindío y Valle (0, 22%), Risaralda (0,21%), Antioquia (0,20%) y Atlántico (0,19%), en cuanto a ciudades capitales las de mayor prevalencia en este mismo grupo etario fueron Medellín (0,34%), Cali (0,30%) y Bogotá y Villavicencio (0,24%) y Armenia y Bucaramanga (0,22%), concentrando en esta 11 ciudades el 63% de los casos reportados. (1) (2) El tratamiento por excelencia del el VIH, son los medicamentos retrovirales, combinados con terapia hormonal, nutricional y citoquinas. El objetivo general del tratamiento antirretroviral es la supresión máxima y prolongada de la carga viral del VIH en el plasma, y la meta es que esto sea a en niveles inferiores a 50 copias de RNA viral/ ml1. El control viral restaura y preserva la función inmune de los individuos, disminuye la morbi-mortalidad relacionada o no al SIDA, mejora la calidad de vida y reduce el riesgo de transmisión. La expectativa de vida de las personas que viven con el VIH secundaria a estos tratamientos ha incrementado, pero genera una serie de complicaciones secundarias que afectan la función física del individuo. Dentro de los efectos secundarios de los retrovirales se mencionan la hepatotoxicidad, hiperlipidemias, hiperglucemia, incluso osteopenia y osteoporosis por efecto de los medicamentos inhibidores de la proteasas y acidosis láctica; lipodistrofia y erupciones cutáneas por los inhibidores de la transcriptasa inversa análogos de los nucleósidos; (3) (4) (5) y problemas gastrointestinales, diarrea, anorexia, dolor abdominal, los cuales afectan el consumo de calorías y la absorción de nutrientes que empeoran el cuadro y el síndrome de emaciación no tarda en aparecer (6) de igual manera se han descrito impedimentos neurológicos como disminución de la capacidad mental y neuropatías craneales que inciden en el desempeño a nivel ocular, visual, olfatorio, etc. (6) y que influyen negativamente en la capacidad de la persona para realizar actividades de la vida. Por otra parte se sabe que el ejercicio y la actividad física mejoran la condición física y mental de una persona y además ha sido asociado con el fortalecimiento del sistema inmunitario (6) (7), en este sentido se puede considerar una estrategia que beneficiará la calidad de vida del paciente al mejorar el bienestar, la imagen corporal y el estado emocional, y por otra parte, reducir las consecuencias incapacitantes de los problemas de salud crónicos causados por la infección por VIH. Según lo mencionado anteriormente el Síndrome Metabólico y la inactividad física incrementan en este grupo los factores de riesgo en cuanto a mortalidad temprana y morbilidad por enfermedades crónicas, es por esto que el proyecto pretende caracterizar este grupo de paciente con VIH y realizar un estudio descriptivo, transversal, en cual se evaluará el nivel de actividad física global y por dominios de pacientes con VIH de una EPS de la ciudad de Bogotá. Se incluirán pacientes, hombres y mujeres con edades comprendidas entre los 18 y 40 años, con diagnóstico de VIH, que den su consentimiento informado de participación en el estudio y se les aplicará el Cuestionario Internacional de Actividad Física IPAQ.