La leishmaniosis es una enfermedad desatendida, endémica en 98 países con un total de 350 millones de personas en riesgo. La prevalencia global es de 12 millones de casos, incidencia por año de 1.5 a 2 millones de casos y tasa de mortalidad anual de 59.000 muertes 16. Los efectos secundarios, los cuales incluyen toxicidad en diferentes órganos y en algunos casos la muerte repentina, la administración parenteral y la emergencia de resistencia son comunes en las drogas antileishmaniales como el estibogluconato de sodio, meglumina, pentamidina, miltefosina y anfotericina B1, 3, 15. Adicionalmente, el limitado acceso a tratamientos aparte de los existentes hace de la búsqueda de moléculas activas con efecto antileishmanial y su posible mecanismo de acción, la alternativa terapéutica para el control de la enfermedad 20. Por esta razón, la búsqueda de nuevas moléculas se ha enfocado en compuestos naturales como alcaloides quinolónicos y seco-limonoides, los cuales son ampliamente distribuidos en la naturaleza y tienen una gran importancia para el tratamiento farmacológico de enfermedades parasíticas 7, 23. Sin embargo estas moléculas no han sido bien estudiadas (mecanismo de acción, blancos terapéuticos), debido a su heterogenicidad (Extracción y Purificación) y bajas concentraciones en la planta (Raputia heptaphylla) de la que se extraen 9. Dado al potencial interés que tienen estos compuestos para el tratamiento de leishmaniosis, el objetivo del presente estudio es la exploración por medio de herramientas bioinformáticas de moléculas análogas de los compuestos extraídos de R. heptaphylla con efecto antileishmanial, así como la determinación de posibles blancos terapéuticos y mecanismos de acción involucrados en la eliminación del parasito dentro del huésped.