En los últimos años se ha desarrollado un nuevo campo de conocimiento altamente prometedor, que está encaminado a la regeneración, reparación o reemplazo bioartificial de tejidos y órganos propios del cuerpo humano, conocido como Ingeniería Tisular, la cual ha dado lugar a un nuevo campo en la Odontología: La ¿Odontología regenerativa¿, cuyo objetivo es ofrecer al paciente alternativas de tratamiento enfocadas a la regeneración de tejidos1. La Ingeniería Tisular se basa principalmente en tres componentes fundamentales: a. Células madre, b. matrices o scaffolds, y c. factores de crecimiento 1,2,7. De estos tres componentes encontramos que la elección de la matriz es crucial para permitir que las células se comporten del modo requerido para producir tejidos y órganos de la forma y tamaño deseados3, pues las matrices proveen el soporte biofísico para el reclutamiento, adhesión, proliferación, diferenciación, y/o metabolismo celular4,8. En el área de Endodoncia, la revascularización o revitalización pulpar es el procedimiento no quirúrgico indicado en el tratamiento de los dientes con tejido pulpar necrótico y ápice inmaduro8, basándose en el ideal biológico de restaurar el tejido dentinopulpar a partir de la regeneración de los tejidos involucrados. Por lo anterior es de especial importancia encontrar la matriz con las mejores características que me permitirá su implantación en un ápice inmaduro y la posterior diferenciación celular y regeneración pulpar. |