A través de los tiempos el hombre se ha preocupado por curar las enfermedades y cuidar la salud de su familia, para esto ha recurrido a varios métodos como el uso de productos naturales de donde se han aislado e identificado principios activos. Dichos principios activos pueden ser modificados estructuralmente con el fin de encontrar nuevas alternativas terapéuticas. Este es el caso de las cumarinas que se encuentran en plantas medicinales y que se han aislado y modificado en busca de mejorar de su actividad biológica. Las nuevas moléculas generadas deben someterse a estudios farmacológicos, toxicológicos y clínicos. Según la OMS el impacto sobre la salud global de trastornos neurológicos, como la enfermedad de Parkinson, ha sido subestimado. Se calcula que más de 4 millones de pacientes han sido diagnosticados con esta enfermedad en todo el mundo. Los pacientes que padecen este trastorno neurodegenerativo deben soportar síntomas paralizantes durante muchos años, lo que afecta gravemente su calidad de vida. Por esto, día a día se reúnen esfuerzos investigativos encaminados a desarrollar nuevos y mejores tratamientos para esta enfermedad. Este proyecto de investigación propone la evaluación en modelos experimentales, de los efectos antiparkinsonianos y del perfil de toxicidad de compuestos cumarínicos inhibidores selectivos sobre MAO-B obtenidos por síntesis, con el fin de determinar su potencial farmacológico como eventual alternativa en el tratamiento de un trastorno de tan alto impacto en salud pública.