Oscar Niemeyer, en ochenta años de profesión e investigación, ha sabido mezclar la componente personal y subjetiva del quehacer arquitectónico - de una fuerza, complejidad y originalidad formal desbordante - con hechos objetivos relacionados al uso, al clima, a la topografía, a los recorridos, a los flujos peatonales, a la técnica del hormigón armado. Su trabajo fue muy criticado en los años cincuenta y sesenta: algunos textos afirmaban que la poética del maestro era puramente formal, que sus obras eran como objetos de diseño industrial agigantados. La investigación propone el análisis de la obra del maestro “desde dentro” y “desde la ciudad”, un análisis de conceptos y de relaciones. Hay muchos objetos de estudio “oltre la forma”: ideas, pasiones, esperanzas de mejorar la calidad de vida de la gente que merece la pena analizar con precisión para comprender a fondo esta unión indisolubles entre pasiones personales y hechos objetivos que caracterizan la totalidad de realizaciones arquitectónicas y que son para nosotros la herencia de casi un siglo de investigación, de proyectos, de intereses, en un contexto, el de Brasil, que tiene muchas características en común con Colombia. A partir de estas análisis creo se puedan extrapolar ideas y leyes arquitectónicas, urbanas y paisajísticas que son de gran actualidad y que pueden ser utilizadas en el proyecto contemporáneo y futuro.