Se pretende generar un accidente cerebrovascular en el modelo de experimentación animal en ratas y reanimar a través de una trasferencia nerviosa de C7 contralateral el nervio mediano afectado. Con pruebas funcionales (prueba de fuerza de agarre para el nervio mediano y prueba del cilindro) y marcadores objetivos de las rutas nerviosas (mapeo cortical y la inyección muscular de la subunidad b de la toxina del cólera con peroxidasa de rábano) se pretende demostrar que la transferencia nerviosa es útil en los accidentes cerebrovasculares. En un estudio con 20 ratas, organizadas en tres grupos, a las que se les provocara un accidente cerebro vascular. El grupo 1, de 10 ratas, se someterá a una transferencia de la raíz C7 contra-lateral al accidente cerebrovascular, al nervio mediano con un injerto de nervio cubital y neurorrafias termino-terminales. Al grupo 2 de 5 ratas, se le practicará la disección necesaria para la transferencia de C7, pero no se llevará a cabo la transferencia, por lo tanto será el grupo falso, y el 3 grupo, de 5 ratas será el control. Se medirá la regeneración nerviosa, con la prueba de fuerza de agarre para el nervio mediano, con la prueba del cilindro para el nervio radial. Posteriormente se practicarán pruebas específicas que evidencien el estado funcional motor de dichos nervios. Luego se aplicará una inyección en los músculos flexores del antebrazo reinervados, con la subunidad beta de la toxina del cólera más peroxidasa de rábano, al cabo de 1 semana se realizará el mapeo cortical, el sacrificio del animal y los cortes del cordón espinal para obtener la lectura del revelado de la peroxidasa.