De acuerdo al Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE), la principal causa de mortalidad en Colombia es la asociada a las enfermedades cardiovasculares, representando aproximadamente un 52% de la mortalidad total en el país (DANE, 2012). Estas enfermedades cardiovasculares se encuentran estrechamente relacionadas con desordenes metabólicos como la dislipidemia y la hiperglicemia, asociadas principalmente a deficientes prácticas de alimentación (Getz y Reardon, 2007; ENSIN, 2011). Sin embargo, es bien conocido que una de las principales medidas terapéuticas y nutricionales para tratar los problemas asociados a la presencia de altos niveles séricos de triglicéridos, colesterol, lipoproteínas de baja densidad (cLDL), glucosa y obesidad en general, es el consumo controlado de fibra dietaria en la dieta (Ludwig et ál., 1999). La fibra dietaria es un importante componente de algunos alimentos de origen vegetal con unas reconocidas propiedades nutricionales y funcionales importantes para la salud humana (Wahlqvist et ál., 1981). En este sentido, el incremento en el consumo de fibra dietaria, entre estas la pectina, en la dieta podría desempeñar un papel importante en el control de dichas anomalías metabólicas (Sánchez et ál., 2008). Sin embargo, aún no se tienen claros los mecanismos moleculares ejercidos por la pectina, tanto a nivel de la absorción intestinal de grasas y azúcares, como a nivel de la síntesis de colesterol y lipoproteínas cLDL a nivel hepático, ni el efecto fisiológico de la pectina sobre la producción de insulina para la regulación de los niveles séricos de glucosa (Galisteo, et ál., 2008). De acuerdo con algunos estudios recientes relacionados con la funcionalidad alimentaria de la fibra (Anderson et ál., 2009; Parkar et ál., 2010; Ruiz-Roso y Pérez-Olleros, 2010), la fibra dietaria ofrece beneficios para la salud humana, específicamente en la regulación del metabolismo de los lípidos y carbohidratos. El consumo de fibra dietaria soluble y concretamente de pectina, se encuentra asociado a la disminución de los niveles séricos de glucosa, colesterol, lipoproteínas cLDL y al aumento de las lipoproteínas cHDL (Frape y Jones, 1995). Sin embargo, el mecanismo de acción ejercido por la pectina sobre la disminución de los niveles séricos de lípidos y glucosa, aún no está bien establecido. El presente proyecto se enmarca dentro de los estudios que desde hace algunos años el grupo de investigación Estudio de los Cambios Químicos y Bioquímicos de Alimentos Frescos y Procesados del Departamento de Química de la Universidad Nacional de Colombia, ha venido realizando en cuanto al estudio de los fenómenos bioquímicos involucrados en el mecanismo de regulación que ejerce la fibra dietaria sobre el metabolismo de lípidos y carbohidratos. Es por esto que el presente proyecto tiene como propósito evaluar los efectos moleculares in vitro e in vivo de la pectina sobre los niveles séricos de glucosa, colesterol, triglicéridos y lipoproteínas cLDL, contribuyendo al conocimiento bioquímico del mecanismo ejercido por la pectina en la regulación del metabolismo de lípidos y carbohidratos y su relación con el control del peso corporal y en general, en la protección contra enfermedades cardiovasculares. Con los resultados obtenidos en este proyecto, se espera poder proponer un mecanismo aproximado y preliminar del efecto producido por la pectina sobre la regulación del metabolismo de los lípidos y carbohidratos, extrapolables a la salud humana y su función en la protección contra enfermedades cardiovasculares asociadas a las malas prácticas de alimentación y nutrición.