Los peces de la familia Ciclidade, como los Apistogramma, constituyen un grupo de extraordinaria riqueza y diversidad morfológica. Para Colombia se conocen unas 115 especies, sin contar aquellas por describir y que son nuevas para la ciencia (Mesa y Lassoet al, 2011). Datos del 2006 muestran que las exportaciones de los peces ornamentales del país representaron el 4,26%, con USD 7.031.173., 00 estando las especies de la familia Cichlidae entre las cinco primera de importancia. Para la actividad pesquera ornamental, el Instituto Colombiano de Desarrollo Rural- Incoder, estableció una lista oficial de 444 especies, de las cuales 63 pertenecen a la familia Cichlidae y de esta 12 en particular al género Apistogramma (Mesa y Lassoet al, 2011). Debido a la pesca excesiva y destrucción del hábitat, causada por los cultivos ilícitos, la tala de bosque, la minería ilegal el Apistogramma cacatuoides es una especie en peligro (no catalogado) de extinciones locales. Debido a esto, los pescadores locales deben incrementar el esfuerzo de captura para conseguir esta especie que últimamente es muy solicitado en el mercado nacional e internacional (Wise, 2012) La reproducción en cautiverio de Apistogramma Cacatúa es importante porque contribuye con la conservación de esta especie en su hábitat natural, disminuyendo la captura y comercialización en su medio (Wise, 2012).