Regiones como la Amazonía, ricas en biodiversidad y con una creciente industria que lucha por entrar a competir en el mercado globalizado, cuentan con diversas materias orgánicas que pueden resultar de gran interés para el desarrollo de alternativas productivas para la auto sostenibilidad regional y la generación de valor agregado para el mercado externo, es así como el dinamismo comercial de la amazonía colombiana ha fundamentado la actividad productiva en la transformación de los recursos biológicos. Uno de estos recursos, la yuca, desempeña un rol importante al ser la fuente tradicional de alimentación de las comunidades indígenas de la amazonía; esta relevancia se fundamenta en el conocimiento, cultivo y conservación de las variedades existentes en la región que ha sido alcanzada gracias a las tradiciones culturales desarrolladas a través del tiempo. Estudios adelantados por el Instituto SINCHI, el ICBF - Agencia Amazonas y once comunidades indígenas, permitieron identificar sobre la ribera colombiana del río Amazonas, 20 variedades nativas de yucas dulces y 18 de yucas bravas o amargas desconocidas hasta el momento, logrando caracterizar las diferencias morfológicas del material de estudio y los tiempos de cosecha, los cuales se encuentran entre tres meses y un año (Acosta, 2005). Sin embargo, el escaso aprovechamiento industrial de la yuca en la región, generado por el deficiente sistema de transporte, el pobre desarrollo tecnológico, la mínima generación de valor sobre el producto y los escasos recursos energéticos e insumos para la transformación, afectan el interés comercial, la extensión de cultivos y la generación de ingresos para agricultores, transformadores y comercializadores regionales. Por lo tanto, esta amplia variedad de especies de yuca (Manihot Esculenta) pueden llegar a ser potencializadas, a través del desarrollo científico en torno al análisis y transformación de la yuca para el sector productivo. Para ello, se puede aprovechar el conocimiento tradicional, la transferencia tecnológica y la generación de conocimiento, que se puede dar con el trabajo conjunto de instituciones como la Universidad Nacional de Colombia, el Instituto Amazónico de Investigaciones Científicas SINCHI y la participación de 13 Chagras Indígenas localizadas en la Isla de la Fantasía en Leticia. En vista de esta problemática, se propone el estudio de la transformación y generación de valor agregado de la yuca amazónica, a través de la producción por vía enzimática de carbohidratos de bajo peso molecular que posteriormente pueden ser orientados a la elaboración de azúcares fermentables (glucosa o fructosa) o alcohol, que debido a su poder edulcorante, características benéficas para la salud y utilidad en el mercado, cuentan con un valor significativo para la industria y una demanda potencial en el mercado.