Desde la divulgación del Acuerdo General para la Terminación del Conflicto entre las FARC-EP y el Gobierno Nacional en agosto del año 2012 y, de la misma forma, la concreción del punto dos (2) en el borrador conjunto participación política: apertura democrática para construir la paz en noviembre de 2013, hay una incertidumbre generalizada al interior de la sociedad, la insurgencia, la academia y el Estado respecto a la concreción jurídica del acuerdo y sus diversos efectos sobre el sistema y régimen político. Aunque se hace necesaria la renovación de los mecanismos y reglas mediante las cuales se accede a los cargos de representación y ejercicio del poder del Estado de cara al post-acuerdo , entendido como el diseño de una nueva arquitectura institucional, no son del todo claras las leyes, el tipo de refrendación y los actores que van a concretar la referida ampliación y profundización democrática.
La lectura de los partidos políticos, entendidos estos como organizaciones de carácter político que cumplen un rol de intermediación entre el Estado y la sociedad, se cumple en dos direcciones en este proyecto: en primer lugar, a partir de los registros electorales, con lo cual se buscar describir y caracterizar a nivel espacial-temporal la forma en que son elegidos los partidos y candidatos como gobiernos desde los ciudadanos y su disposición en el escenario nacional. Y, en segundo lugar, a partir de los procesos mediante los cuales los representantes, partidos políticos y bancadas gestionan sus intereses propios y de los ciudadanos en el ámbito de producción legislativa, permitiendo ampliar o limitar la reforma democrática necesaria para el post-acuerdo.
Sin duda alguna, se hacen necesarias investigaciones que le den sustento al debate jurídico y político referido en los acuerdos parciales del proceso de paz negociado en La Habana. La caracterización y rastreo de las reformas legislativas, así como las tendencias electorales, permitirá brindar novedosas e importantes reflexiones en dos sentidos; (I) aportando nuevos elementos teórico-conceptuales sobre el quehacer del sistema de partidos, el poder legislativo y el sistema electoral en la construcción de una sociedad en paz y democrática; y (II) la caracterización, descripción y análisis de las potencialidades, fragilidades y vacíos que posee el punto dos (2) del acuerdo general y el borrador conjunto de participación política de cara a ampliación de la representación y participación política.
Con la pretensión de cumplir los objetivos planteados en el marco de este proyecto y llevar a buen término el posicionamiento interpretativo y analítico esgrimidos en el problema de investigacion, se propone una metodología deductiva-inductiva dividida en dos fases: en primer lugar, de corte deductivo-cuantitativo que se ha denominado como fase heurística; y, en segundo lugar, de corte inductivo cuantitativo y cualitativo que se ha llamado fase hermenéutica.
Desde los elementos anteriormente expuestos, es claro que la fase descriptiva de este trabajo resulta ser deductiva en tanto busca consolidar un vínculo entre el marco teórico propuesto con la observación presente en los registros electorales y procesos legislativos de los partidos políticos e, igualmente, organizar la información inserta en ellos para dejarla lista con una fase complementaria que les dará otro tipo de tratamiento de corte interpretativo y analítico. La fase hermenéutica sería inductiva en tanto parte de los tendencias, casos, particularidades y correlación de fuerzas partidarias suministradas por la primera fase para formular a partir de la indagación (análisis e interpretación) cualitativa y cuantitativa, generalizaciones que se conviertan en tesis, leyes y teorías de alcance medio.
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