La Amazonia se caracteriza por sus selvas ecuatoriales densas con muy alta diversidad específica y características climáticas que definen procesos de circulación interna de energía de alta complejidad y eficiencia. A pesar de la diversidad biótica y oferta de biomasa y recursos con valor en los mercados, la economía es de tipo local, no existen cultivos significativos en términos de producción y por lo tanto, el sistema productivo es de bajo valor agregado y basado en la extracción de recursos naturales. Los habitantes de esta región han estado ligados por siglos a los recursos naturales y a sus fuentes de energía de manera muy restringida en términos tecnológicos y de escala frente a los mercados. Este proyecto se erige como una oportunidad para analizar alternativas de producción, consumo e inserción en los mercados a través de vínculos entre diferentes frentes de saber como el conocimiento tradicional indígenas, las adaptaciones tecnológicas de campesinos y ribereños y el conocimiento científico para llegar a la formulación de propuestas de producción basadas en sistema tecnificados de alta sostenibilidad económica, social y ambiental. Los ecosistemas amazónicos cuentan con diversas fuentes de energía como las plantas vivas, que son comúnmente utilizadas para la medicina tradicional y alimentación. Su uso se basa en la extracción de componentes que son considerados en el lenguaje científico metabolitos secundarios. Las plantas vivas producen una amplia variedad de metabolitos secundarios con el fin de adaptarse a su entorno. Estos metabolitos secundarios se consideran productos residuales del metabolismo vegetal, que tienen un gran valor a nivel industrial, energético, alimentario y farmacéutico. Teniendo en cuenta la contextualización anterior de la propuesta, este proyecto pretende integrar la ingeniería de procesos y el conocimiento tradicional, que son las fortalezas de los grupos de investigación de Procesos Químicos Catalíticos y Biotecnológicos y del grupo de Desarrollo Regional en la Amazonía respectivamente, todo con el fin y de acuerdo al análisis de ingeniería de procesos, de evaluar las ventajas técnicas, económicas y ambientales de la producción de metabolitos para ser utilizados a nivel industrial sin generar un impacto negativo en las comunidades rurales.