Existe un creciente interés por el uso y desarrollo de fuentes limpias de energía que ayuden a contrarrestar los efectos del cambio climático [1], además que sean capaces de soportar los requerimientos energéticos actuales [2]. La energía solar fotovoltaica es una de las opciones energéticas de amplio crecimiento debido a su abundancia, disponibilidad y el ser ambientalmente limpia [3]. Existen dos aplicaciones típicas para la energía fotovoltaica ellas son en sistemas autónomos y en sistemas interconectados. Un sistema autónomo requiere de un arreglo de baterías para almacenar la energía fotovoltaica y entregar la energía en el momento en que el sol no la puede suministrar. Por otro lado el Sistema Fotovoltaico Interconectado que en adelante denominaremos como (SFVI), no requiere de un arreglo de baterías y se usa típicamente para aplicaciones de alta potencia y en sistemas de generación distribuida [3]. Los SFVI entregan la energía generada la red eléctrica urbana AC, para que esta pueda ser usada en cualquier parte de la red. Esto se logra mediante un proceso de conversión eficiente DC/AC utilizando convertidores estáticos [4]. Sin embargo generación de energía fotovoltaica tiene dos grandes problemas, ellos son: La baja eficiencia de la energía eléctrica generada por la celda en comparación con la energía proveniente de la radiación solar, especialmente ante baja irradiación. Segundo La cantidad de energía generada depende de las condiciones ambientales, particularmente de la irradiancia y la temperatura. El punto de máxima potencia se presenta en el punto en el cual la relación (P = IV) es máxima y es este el punto en el cual la celda logra generar la mayor cantidad de energía posible. Por lo tanto lo deseable es que sin importar las condiciones ambientales el producto de corriente y voltaje sea en todo caso el máximo posible. Es en este punto es donde entra en juego el control para el seguimiento del punto de máxima potencia. Este control actúa directamente sobre el convertidor estático ya que este se encarga de controlar la transferencia de energía generada por la celda solar. Por este motivo es indispensable que el SFVI cuente con un sistema de Seguimiento del Punto de Máxima Potencia en tiempo real. De esta manera se logra aprovechar la máxima cantidad de energía fotovoltaica que puede ser generada bajo diferentes condiciones ambientales [5].