Los primeros años del crecimiento humano se consideran como facilitadores y determinantes del desarrollo ulterior, por tal razón, el desarrollo motor y la educación del movimiento en la niñez son temas de gran interés. Las experiencias motrices de la infancia son necesarias para el desarrollo y perfeccionamiento de esquemas maduros a nivel motor y demás facetas que integran la persona, convirtiéndose en estructura básica para el aprendizaje cognitivo. Los patrones básicos del movimiento (caminar, correr, saltar, lanzar, etc.) representan los ejercicios primarios sobre los cuales se basan todos los otros movimientos locomotores de la adultez, de una buena valoración de dichos patrones, se infiere información valiosa acerca de la correcta maduración física y funcional del niño(a). Cuando la ejecución de los patrones básicos de movimiento es deficiente, se presentan, en el mediano o largo plazo, dificultades para realizar los movimientos habituales de la vida diaria. Aunque en el tema de análisis biomecánico del movimiento, en el deporte, hay grandes desarrollos hace varias décadas, para los movimientos básicos no se han desarrollado instrumentos confiables y de fácil acceso que permitan al profesor de educación física, al reeducador motriz, y a personal de pediatría (en diferentes áreas), detectar posibles falencias y hacer las intervenciones necesarias. Los movimientos básicos pueden ser evaluados de forma automatizada y no invasiva, a través de un sistema de reconocimiento de patrones, basado en técnicas de extracción no lineal de características, que analice registros de video de niños(as) realizando una serie de ejercicios físicos preestablecidos, con el fin de obtener información acerca de posibles deficiencias motoras, fortaleciendo la detección temprana de inconvenientes o deterioro biomecánico. En este sentido, es necesario establecer y caracterizar los patrones de movimiento para las actividades: caminar, correr, saltar y lanzar, de niños y niñas de 5 a 8 años residentes en áreas urbanas, de modo que se obtenga información respecto al desarrollo madurativo y funcional de la población en análisis. Con el fin de alcanzar estas metas, es necesario desarrollar las siguientes etapas metodológicas: Identificación y descripción de la muestra, caracterización de los patrones básicos de movimiento, registro de videos, representación y caracterización de secuencias de imágenes empleando técnicas de extracción no lineal de características, inferencia y clasificación automatizada de los movimientos y finalmente, la validación y pruebas de rendimiento del sistema. Como resultado de la investigación se espera desarrollar un prototipo de análisis automatizado de movimiento, enfocado a detectar diferencias entre los patrones básicos de movimiento y las ejecuciones de los mismos realizados por la población objetivo, que permita apoyar el diagnóstico de dificultades al efectuar las acciones físicas determinadas. Es así como de los resultados que arroje la investigación, se podrá beneficiar la comunidad educativa y personal del área de la salud, ya que se facilitará el diseño y desarrollo de programas neuromotores, que integren los distintos patrones motores a ser dominados y sea posible iniciar el entrenamiento de las acciones segmentarias de algunas partes del cuerpo para lograr una correcta ejecución técnica de las habilidades motrices básicas.