En la actualidad, un grupo de estudiantes de las carreras de Ingeniería Civil, Ingeniería ambiental, Construcción y Arquitectura, de las Facultades de Arquitectura y Minas de la Universidad Nacional de Colombia, viene trabajando junto con los profesores Luis Suarez y Jaime Sarmiento Ocampo en el desarrollo de una propuesta para desarrollar un módulo productivo y educativo en el Colegio Didascalio (lugar del Saber), ubicado en El Barrio El Pinar, al nor-oriente del Valle de Aburrá. El Taller que agremia estudiantes y profesores de denomina TACS (Taller de Arquitectura y Construcción Sostenible). El colegio Didascalio, Hna. Josefina Serrano, está ubicado en San José del Pinar, en el Municipio de Bello, en el km 7 de la vía antigua a Guarne, en una zona de difícil acceso, pues la vía está sin pavimentar y son pocas las lineas de transporte público. Actualmente, allí estudian 400 niños entre los 4 y los 15 años, los cuales son pertenecientes a familias altamente vulneradas, tanto económica como socialmente, pues son personas víctimas de complejas problemáticas de violencia y de desplazamientos forzados. El Colegio, además de brindar educación, atiende a los niños con subsidio alimentario por medio de la Fundación ABC Prodein, a través de la cual particulares hacen un apadrinamiento brindando apoyos económicos de manera periódica. Sin embargo, los recursos no son suficientes pues, para muchos de los estudiantes, el almuerzo recibido en el colegio es la única comida al día y, además, deben salir del colegio a sus 15 años a enfrentarse a situaciones todavía más complejas, en las cuales difícilmente pueden continuar con su educación. Es por esto que las directivas de la institución quieren mejorar sus instalaciones y buscan alternativas que provean al Colegio de mayores ingresos, con el fin de tener un mayor grado de soberanía alimentaria y de brindar también una educación más especializada, que pueda generar mejores oportunidades a los jóvenes de la comunidad. La institución cuenta con aproximadamente 10 hectáreas, de las cuales se ha construido muy poco porcentaje para desarrollar las actividades educativas. La comunidad del sector está compuesta por unas 5.000 personas, entre niños del Colegio, educadoras, padres de familia y vecinos del sector, que se verían beneficiadas con esta propuesta por que además involucraría a los padres y vecinos en los procesos productivos y de seguridad alimentaria. Con base en las circunstancias mencionadas, se plantea este proyecto como respuesta ante una serie de necesidades encontradas. Así pues, se unieron conocimientos desde distintas áreas para proponer, diseñar y construir una solución de infraestructura sostenible y económica como unidad productiva conformada por un galpón, una huerta y un espacio de interacción y aprendizaje. Esto, con el objetivo de contribuir a la comunidad de distintas formas, pues le permitirá obtener recursos alimenticios a la vez que se involucra a los niños en el proceso como propuesta hacia nuevas dinámicas pedagógicas de educación, por medio de las cuales los niños tengan un acercamiento a un ciclo productivo que implementa nuevas maneras de aprender, entiendan y sean partícipes de su funcionamiento siendo conscientes de los recursos y de la importancia de la armonía producción-medio ambiente. Además, el proyecto está encaminado hacia la sostenibilidad, de tal manera que los materiales que se pretenden utilizar son naturales, renovables y de fácil obtención; lo que permite la posterior implementación del sistema constructivo en el Colegio o en comunidades con características similares. Esta inicitiva, que procura responder a necesidades concretas de una comunidad, también busca realizar una formación integral en estudiantes de la Universidad Nacional, pues se trata de un trabajo interdisciplinar en el que se involucran diferentes profesiones y una comunidad específica, cumpliendo con las labores misioneles de Universidad de Docencia, Investigación y Extensión.