El modelo de desarrollo modernizante surgió tras la Segunda Guerra Mundial bajo la premisa de la Revolución Verde: al incrementar la productividad de los cultivos se solucionaría la hambruna en el mundo producto de la postguerra, esto trajo consigo serias consecuencias en términos de la diversidad alimentaria de la población, pues para incrementar los rendimientos se estandarizó la producción y apareció el monocultivo. Es así, como la dieta de la humanidad en el último siglo se ha reducido a unas cuantas especies vegetales y animales, lo que ha llevado a la pérdida de un sin número de variedades locales conservadas por las comunidades. Frente a esta situación, los gobiernos, como estrategia de conservación de la agrobiodiversidad proponen la creación de bancos de germoplasma los cuales almacenan las semillas fuera de los sitios de origen y en su mayoría pertenecen a centros de investigación y universidades (conservación ex situ), sin embargo, las comunidades han generado durante miles de años procesos de selección y mantenimiento de la agrobiodiversidad, y cuentan con estrategias de conservación de sus semillas para el resguardo, rescate, distribución y uso de las mismas, considerándolas patrimonio alimentario y cultural de la comunidad.
En este sentido, la presente propuesta pretende analizar las estrategias de conservación de semillas que se dan en las comunidades para el rescate, protección, distribución y uso de la agrobiodiversidad frente al enfoque modernizante de desarrollo rural que amenaza la preservación de sus semillas y su agrobiodiversidad. |