Colombia, cuya área boscosa abarca un poco menos de la mitad de su área total, se caracteriza por ser un país altamente biodiverso, que contiene especies endémicas de fauna y flora y representa el hábitat de pueblos indígenas que han tomado la decisión de aislarse y evitar todo contacto con la sociedad occidental. Por lo anterior, la Universidad Nacional de Colombia en alianza con la Universidad El Bosque, Amazon Conservation Team (ACT) y Parques Nacionales Naturales de Colombia (PNNC), busca la salvaguarda de estos pueblos a través de la protección de su territorio, y por ende, de sus medios de vida. Sin embargo, sus territorios son ricos en recursos maderables y mineros, convirtiéndolos en zonas de interés de múltiples actores ilegales e informales, repercutiendo no solo en la explotación insostenible de recursos y degradación de ecosistemas, sino también, en posibles riesgos de contacto con estos pueblos. El contacto con estos pueblos puede significar una mortalidad de hasta el 50% dada la ausencia de defensas a enfermedades transmisibles [8] por ello son considerados por la ONU como los pueblos más vulnerables de la tierra. Particularmente, el Parque Nacional Natural Río Puré (PNNRP), creado en el año 2002, se considera una zona de especial importancia por ser un ecosistema estratégico para la seguridad ecológica del país. Esta área, de aproximadamente 1 millón de hectáreas, es considerada de gran valor para el patrimonio cultural del país, pues en los territorios del PNNRP se han identificado plenamente dos PIA, correspondientes a las etnias Yurí y Passé [9].
En aras de garantizar la integridad de los bosques y la garantía de derechos humanos de estos pueblos, nuestra alianza, busca desarrollar un sistema piloto de vigilancia, con sensores remotos y con la posibilidad de captar y enviar información, para el Parque Nacional Natural Río Puré (PNNRP), que permita tener un conocimiento de las presiones y amenazas en el área protegida y así poder generar acciones de control. En el contexto de los parques naturales se conocen como Amenazas los eventos que podrían llegar a afectar el área protegida y como Presiones los eventos que ya están causando un daño a la misma.
El sistema que debe instalarse en la proximidad de los ríos amazónicos, debe ser robusto, económico, tener autonomía energética, debe ser difícil de identificar por parte de los infractores, confiable, adaptable y resistente a las condiciones climáticas de la Amazonía. De acuerdo con lo anterior la realización del proyecto se ha divido en 3 módulos: Módulo de alimentación autónomo, que proporcionará la fuente de alimentación a todo el prototipo; Módulo de identificación y sensado que será el encargado del sensado remoto y activación de las cámaras cuando se presente una perturbación en el territorio y las cámaras que permitan la captura de imágenes o video y finalmente el Módulo de comunicación que es el encargado de la comunicación, en la cual se enviarán las fotos o videos correspondientes cuando se presente un evento.
Así mismo, el proyecto se divide en 6 fases, comenzando con una fase de adquisición de información, seguida de la fase de diseño, estas dos fases se realizarán principalmente en las sedes Bogotá de las diferentes instituciones que participan en la Alianza. A continuación, sigue la fase de evaluación del diseño para la cual se trabajará en el Parque Nacional Natural Chingaza. Finalmente se tienen las etapas de implementación y pruebas de diseño que se realizarán en el Amazonas, particularmente en la Sede de la Universidad Nacional en Leticia, el Parque Nacional Natural Amacayacu y el Parque Nacional Natural Río Puré.
Al finalizar el proyecto se espera contar con un prototipo funcional que pueda trabajar en las condiciones climáticas propias de la Amazonía, cuyo desempeño esté debidamente caracterizado y evaluado y que pueda ser replicado fácilmente en diferentes lugares de la Amazonia. |