El Plan Decenal de Salud Pública (PDSP), 2012­2021, busca mejorar las condiciones de vida que modifican la situación de salud, disminuyendo la carga de enfermedad existente. Para el caso particular de malaria en este plan se registra que la incidencia de las enfermedades transmitidas por vectores, como malaria ha tendido al incremento durante el trienio 2008-­2010. La incidencia de malaria asociada a Plasmodium vivax y a P. falciparum aumentó en 3,6 y 1,5 casos por cada 1.000 habitantes, respectivamente. Colombia es el segundo país en la región de las Américas en cuanto el número de casos reportados de malaria. Las características geográficas, climáticas, de migración de personas a zonas endémicas, la guerra y la baja cobertura de salud pública hace que se presenten de manera constante casos de morbilidad y mortalidad por malaria, con lo cual se genera un alto impacto social y económica. Adicionalmente, la resistencia por parte del parásito a la quimioterapia tradicional, la falta de nuevos fármacos o vacunas eficaces ha hecho que se busquen nuevas alternativas económicas y de amplia cobertura para el manejo de esta enfermedad. En este sentido, una opción es la utilización de plantas medicinales con antecedentes etnofarmacológicos de actividad antimalárica, conocimiento que hace parte de la cultura de diferentes comunidades de Colombia. De lo anterior se deriva la necesidad y la oportunidad de desarrollar nuevas alternativas terapéuticas para el tratamiento de la malaria, entre las que están los productos fitoterapéuticos, con los cuales se busca además aprovechar tanto nuestra biodiversidad como nuestra cultura. En este sentido, con este proyecto se busca avanzar en la consolidación de información sobre eficacia y seguridad, que unido a la caracterización química de especies que crecen en Colombia, establezcan las bases para el desarrollo de extractos estandarizados y de productos fitoterapéuticos. Específicamente con esta investigación se pretende caracterizar, química y farmacológicamente, extractos y fracciones de especies vegetales colombianas con antecedentes antimaláricos, con el fin de contribuir al desarrollo en la estandarización de un extracto, tendiente a la formulación de un producto fitoterapéutico. Para alcanzar este propósito se evaluará la actividad antiplasmodial In vitro, empleando el modelo de cultivo de P. falciparum, de extractos etanólicos de las plantas seleccionadas. Posteriormente se evaluará In vivo la actividad antimalárica mediante el modelo de malaria murina. Además se propondrán compuestos o clase de metabolitos secundarios que puedan ser considerados como marcadores analíticos o terapéuticos, necesarios en la caracterización y control de calidad de la materia prima herbal y del ingrediente natural, así como en las diferentes etapas conducentes a la estandarización del extracto. Además, se evaluará la toxicidad aguda y subcrónica, con lo cual se busca tener información sobre la seguridad de la especie vegetal.