El concreto hidráulico es un material fundamental con el que los ingenieros, arquitectos, constructores y trabajadores vinculados con el sector de la construcción diseñan y elaboran las obras concebidas para el desarrollo de las ciudades y su infraestructura. Construido por diferentes materiales que dosificados y mezclados adecuadamente, se integran para formar elementos monolíticos que proporcionen resistencia y durabilidad en las estructuras. Es muy importante un adecuado conocimiento de sus componentes y de sus propiedades físicas y químicas, al igual que un buen control de calidad. El hormigón o concreto es la mezcla de un material aglutinante (Cemento Pórtland hidráulico), un material de relleno (agregados), agua y eventualmente aditivos, que al endurecerse forma un sólido compacto y después de cierto tiempo puede soportar grandes esfuerzos de compresión (7). Cada uno de los constituyentes del concreto cumple funciones dentro de la mezcla; resistencia propia (resistencia del grano), que garantiza una adherencia en la pasta de cemento endurecida. Los materiales pétreos (agregados) actúan como relleno, haciendo más económica la mezcla (2), la arena y la grava (agregados), en combinación con la pasta fraguada proporcionan resistencia a la compresión. Cuando la mezcla de concreto pasa del estado plástico al estado endurecido durante el proceso de fraguado, los agregados controlan los cambios volumétricos de la pasta evitando que se generen agrietamientos por retracción, que puede afectar la resistencia. Un material que se puede adicionar al concreto, son la cenizas volantes. Las cenizas volantes son partículas muy finas, vitrificadas y esféricas, residuo de la combustión del carbón utilizado en centrales termoeléctricas. EL ACI 116 R (Cement and Concrete terminology), define la ceniza volante como, ¿el producto finamente dividido, resultante de la combustión de carbón molido o pulverizado y el cual es trasportado desde el horno mediante flujo de gases¿. La ceniza volante está compuesta por tres elementos predominantes: sílice, aluminio y hierro, los cuales se presentan en forma de óxidos que representan del 75% a 95 % del total del material. Análisis mineralógicos muestran que del 65% a 90% de la ceniza se encuentra en estado vítreo. La ceniza volanta está formada por partículas en su mayoría esféricas, unas son partículas fundidas de color gris oscuro (contienen compuestos de hierro), otras son, no fundidas de color gris claro. Debido a la abundancia de partículas microscópicas esféricas y sobre todo a la finura de la ceniza volante, se deben tomar precauciones especiales durante el manejo y transporte del material seco para evitar pérdidas y polvos molestos.