La anestesia regional es una modalidad de la anestesiología destinada a aliviar el dolor y/o anular completamente la sensibilidad, cuyo uso ha aumentado en la práctica clínica por su carácter innovador y seguro. Particularmente, la analgesia por vía neuroaxial ha demostrado ser una de las medidas más seguras para el alivio del dolor del trabajo de parto facilitando la función del anestesiólogo en el acompañamiento de la paciente obstétrica, permitiendo el alivio del dolor para completar el curso del parto vaginal y mejorando las condiciones fisiológicas.
La detección temprana de la efectividad de la analgesia permite adoptar medidas correctivas y establecer con seguridad la posibilidad de realizar intervenciones a la paciente por ejemplo, incrementar número y cantidad de dosis o reubicar el catéter. Las pruebas de sensibilidad termoalgésica pruebas de frío, pinchazos cutáneos y tacto superficial y modalidades basada en técnicas de procesamiento de imágenes han sido utilizadas clásicamente para este efecto. Sin embargo, estas pruebas de determinación de la efectividad de la analgesia presentan importantes limitaciones:
1) alta inversión de tiempo por parte del personal clínico, 2) se requiere la cooperación estricta por parte de la paciente durante las evaluaciones de tipo sensorial psicofísicas, lo cual incrementa la tasa de falsos positivos y negativos, 3) baja portabilidad, elevados costos monetarios y alto carácter invasivo de los métodos de evaluación electrofisiológica y técnicas de evaluación por neuroimágenes. Recientemente, la termografía por infrarrojo ha cobrado utilidad en el campo de la anestesiología y permite evaluar el bloqueo simpático que sucede tras la administración de anestésicos, caracterizando las modificaciones térmicas secundarias a la redistribución del flujo sanguíneo que suceden como efecto fisiológico de
los mismos. Sin embargo, la caracterización de imágenes termográficas como método de evaluación del bloqueo simpático también presenta limitaciones: 1) falta de definición del protocolo correcto para posicionamiento específico de la paciente, 2) los efectos de factores externos que impactan de manera negativa en la adquisición de las señales, y 3) los resultados obtenidos en la revisión del estado del arte son contradictorios.
De manera específica, hasta el momento no se han publicado estudios que empleen este método diagnóstico no invasivo y portables.
Se propone entonces, basados en los más recientes avances sobre procesamiento de imágenes termográficas adquisición, segmentación, identificación de patrones, y de análisis estadísticos sobre correlación de pruebas diagnósticas, caracterizar el efecto de los anestésicos locales administrados en las pacientes de población obstétrica sobre la sensibilidad termo-algésica y la temperatura regional registrada con termografía por infrarrojo, comparando además, el rendimiento de las pruebas diagnósticas a comparar, de tal forma que sirvan de soporte para la evaluación integral de la analgesia en la paciente obstétrica. Aún más, se propone elaborar un modelo predictivo sobre el tiempo de instauración del bloqueo sensitivo, del bloqueo simpático y de la percepción de alivio del dolor mediante la escala visual análoga de dolor (EVA) elaborada y validada para este fin. Finalmente, la metodología de procesamiento de datos termográficos en conjunto con una estrategia de captura y almacenamiento de los mismos se integran en un sistema portable que permita el monitoreo de la efectividad anestésica en entornos clínicos a través de un aplicativo
móvil de bajo costo e intuitivo. En consecuencia, el sistema de innovación tecnológica que se propone permitirá mejorar la calidad de en los procesos de atención en salud materna y perinatal del Hospital Universitario de Caldas SES HUC en Manizales. |