En la actualidad, el desarrollo tecnológico, académico, y los medios de información han permitido que los pacientes conozcan los diferentes servicios a los que pueden acceder, y las condiciones de calidad en los que éstos se deben prestar lo cual conlleva a un cambio de mentalidad del usuario de los servicios de salud, donde él tiene nuevas exigencias no solo de la diversidad de servicios que se le pueden ofrecer sino de su nivel de calidad. El es consciente de sus derechos, y de cómo la calidad, la confiabilidad técnica y la oportunidad a lo que esta accediendo puede repercutir positiva o negativamente en su proceso de salud y enfermedad, en su condición de paciente o en su ejercicio profesional como trabajador de la salud, por tanto tiende a exigir cada vez más eficiencia del servicio y garantía de su calidad; no se conforma con la manifestación de calidad que puede declarar el grupo que vende el servicio, sino que solicita un reconocimiento formal de ésto por otras personas. Además, el hecho de lograr el nivel más elevado de reconocimiento de la calidad: la acreditación, permite ser competitivo en cualquier mercado, porque implica ajustarse a una norma estándar reconocida internacionalmente y ante todo demostrar que el producto o servicio está cumpliendo con los requerimientos técnicos y científicos que hacen que éste sea el mejor y mas apto para su uso. Propiedades que le confieren la capacidad de satisfacer desde el inicio y continuamente, a veces hasta sobrepasar las necesidades y expectativas actuales y nacientes del cliente, quien es la piedra angular de todo el proceso, a quien le facilitará su acción diaria Es de destacar que el Laboratorio de Patología Interfacultades de la Universidad Nacional no es ajeno a esta situación y su permanencia en el medio se basa en la aplicación de estos principios por lo cual, el presente proyecto busca crear y fomentar la cultura de la calidad entre los funcionarios del Laboratorio y la implantación y documentación del sistema de garantía de calidad basados en un proceso de planificación, control, aseguramiento y mejoramiento continuo que se fundamentan en una norma estándar de calidad, que para el caso de los laboratorios de patología sería la norma ISO 17025, lo cual aportaría una guía con requisitos técnicos y administrativos para asegurar que materiales, productos, procesos y servicios que se están generando sirvan para su propósito, y por tanto demostrar que el laboratorio es competente y capaz de generar resultados válidos técnicamente. Además se lograría ser uno de los primeros laboratorios de Patología en Colombia acreditados, por ende sería punto de Referencia técnica y científica de sus homólogos.